Durante el trance producido por el estupor ante la inminente amenaza de fracaso en el parcialito de filosofía, comenzamos a divagar entre posibles alternativas para modificar el sistema de evaluación del Padre Carlos. Gracias a esto, creemos haber descubierto la causa de la misteriosa desaparición de numerosos alumnos dedicados a las áreas humanísticas de la Universidad.
Se preguntarán en qué consiste este método didáctico. Procederemos entonces a explicarlo.
El examen parcial se definiría lúdicamente en una especie de "mancha", es decir, el profesor corre a los alumnos por el pasillo del primer piso de la facultad; antes de tomar contacto con alguno de ellos, el Padre Carlos formulará una pregunta, otorgando 15 segundos reloj para plantear una respuesta. De ser correcta, lo eximirá. En caso contrario, lo hará recursar al grito de ¡bochado!
Bajo el evento fortuito de que el alumno intente impedir la pregunta, interponiendo algún obstáculo en la marcha del profesor para inducir su caída y ganar tiempo, será azotado con un borrador en la cabeza y posteriormente bochado.
Para aquellos que sobrevivan este filtro y alcancen la instancia del examen final, se enfrentarán a un nuevo desafío que pondrá en riesgo no sólo la continuación de la carrera, sino también su mismísima existencia.
El examen parcial se definiría lúdicamente en una especie de "mancha", es decir, el profesor corre a los alumnos por el pasillo del primer piso de la facultad; antes de tomar contacto con alguno de ellos, el Padre Carlos formulará una pregunta, otorgando 15 segundos reloj para plantear una respuesta. De ser correcta, lo eximirá. En caso contrario, lo hará recursar al grito de ¡bochado!
Bajo el evento fortuito de que el alumno intente impedir la pregunta, interponiendo algún obstáculo en la marcha del profesor para inducir su caída y ganar tiempo, será azotado con un borrador en la cabeza y posteriormente bochado.
Para aquellos que sobrevivan este filtro y alcancen la instancia del examen final, se enfrentarán a un nuevo desafío que pondrá en riesgo no sólo la continuación de la carrera, sino también su mismísima existencia.
Para facilitar su comprensión, le proponemos observar la figura nº1:
Figura nº1
El escenario del final se dispone de la siguiente manera: una tabla de madera se apoya perpendicularmente sobre la baranda de la rivera del río, sujeta para que permanezca horizontal. El alumno se sitúa sobre el extremo más alejado al río (considerado el occidente) en la tabla. El profesor realiza entonces las preguntas pertinentes al final.
En caso de un resultado favorable, el alumno puede descender de la tabla. Pero, de no ser satisfactorio su rendimiento, el docente saltará en el extremo oriental de la tabla (es decir, del lado del río), provocando así una acción física de despegue brusco del alumno en dirección al dichoso río y su posterior encuentro con el mismo.
Es posible que este método se inspire en ocurrencias del animé Pokemon, donde el denominado equipo Rocket solía terminar en cada episodio como una estrella en el infinito, derrotado por Ash y su clan.
También creemos firmemente que los alumnos inmersos en las profundidades del río sobreviven en una ciudad sumergida, llamada por los antiguos greco-romanos y que heredamos en la cultura judeo-cristiana "Atlantis", pero no contamos con pruebas evidentes de este fenómeno (lo proponemos como tesis de investigación para quien desea profundizar en esta polémica cuestión).
Tampoco podemos proseguir con nuestra investigación, porque hemos notado que macabras palomas silenciosas se han posado próximas a nosotras, escuchando con atención nuestras conjeturas para comunicárselas al Padre Carlos... Son sus fieles siervas.... ¡sus espías!
Así, la instancia del final se convierte en un trampolín espiritual de la parte al todo, un superar lo sensible hacia lo inteligible...
La Atlantis de los Bochados.
Es posible que este método se inspire en ocurrencias del animé Pokemon, donde el denominado equipo Rocket solía terminar en cada episodio como una estrella en el infinito, derrotado por Ash y su clan.
También creemos firmemente que los alumnos inmersos en las profundidades del río sobreviven en una ciudad sumergida, llamada por los antiguos greco-romanos y que heredamos en la cultura judeo-cristiana "Atlantis", pero no contamos con pruebas evidentes de este fenómeno (lo proponemos como tesis de investigación para quien desea profundizar en esta polémica cuestión).
Tampoco podemos proseguir con nuestra investigación, porque hemos notado que macabras palomas silenciosas se han posado próximas a nosotras, escuchando con atención nuestras conjeturas para comunicárselas al Padre Carlos... Son sus fieles siervas.... ¡sus espías!
Así, la instancia del final se convierte en un trampolín espiritual de la parte al todo, un superar lo sensible hacia lo inteligible...
La Atlantis de los Bochados.
Pequeña acotación sobre las palomas espías:
Luego de esta hipótesis desarrollada por Belén, Ivana constató en su dimensión alternativa, donde su alterego es hablante fluido de alemán, que "Taube" significa paloma y que de hecho, "Taubenschlag" significa "el palomar", es decir, lugar donde se crían palomas, aunque la combinación de morfos literalmente significa "golpe de paloma/s".
Agradecemos el aporte hecho por nuestro especialista en alemán y ciencias físicas, Javier Cambiasso, que despejó estos significados turbulentos..
5 comentarios:
después me dicen a mí que la deliro
júm
EXCELENTE.
JAJAJAJAJAJ
vamos a nadar unos cuantos me parece jaja.
espero que vayan aprendiendo a nadar... el Final es la semana q viene...La venganza será terrible.
Firmado: El Profesor Taubenschlag
¿estaba fría el agua del dique 2?
¿cómo les fue en el final???
... o se borraron?
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